Menorragia: Cuando el Cuerpo Habla y Ayurveda tiene la Respuesta
En este artículo vamos a contarte qué es la Menorragia según la Medicina Ayurveda y por qué los tratamientos convencionales muchas veces no resuelven el problema de fondo.
¿Has sentido que tus menstruaciones se han vuelto cada vez más intensas?
¿Sangras tanto que interfiere con tu rutina, tus energías o incluso tu sueño?
Puede que estés experimentando menorragia. En este artículo vamos a contarte qué es según la Medicina Ayurveda y por qué los tratamientos convencionales muchas veces no resuelven el problema de fondo.
La menorragia es una alteración del ciclo menstrual caracterizada por un sangrado excesivo, ya sea en cantidad, duración o ambos.
En la medicina moderna, el tratamiento suele incluir anticonceptivos hormonales, ácido tranexámico, medicamentos antiinflamatorios, procedimientos quirúrgicos o suplementos sintéticos de hierro.
Pero muchas veces, lo que hacen estos tratamientos es silenciar el síntoma, sin ir a la causa real. El cuerpo comunica por medio de señales, que algo necesita atención, no que algo debe ser suprimido.
Desde el lente de Ayurveda, esta condición se conoce como Asrugdhārã o adhoga rakta pitta. Se trata de un desorden en el dosha pitta, que regula el calor, la transformación y la sangre en el cuerpo. Y si bien puede presentarse en cualquier etapa de la vida, es más común entre los 30 y 45 años, etapa dominada por pitta.
¿Cómo se Genera este Desequilibrio?
El camino (samprapti) puede variar, pero en muchos casos hay una combinación de pitta agravado y vāta alterado.
Cuando Vāta se desequilibra, especialmente por actividades como saltar, correr o levantar peso, empuja a rañjaka pitta (la fracción de pitta responsable de la sangre) hacia los tejidos de plasma y sangre (rasa y rakta dhātus), y en particular hacia el canal menstrual (rajovaha srotas). Esto se traduce en sangrado excesivo, dolor pélvico, ansiedad, insomnio y otras molestias tanto físicas como emocionales.
El desequilibrio de Pitta también puede manifestarse como ardor al orinar, inflamación, sensibilidad en los senos, irritabilidad y hasta actitudes críticas sin razón aparente.
Cuando la menorragia está relacionada con fibromas (miomas uterinos), estamos ante otro caso de Vāta empujando Pitta hacia los vasos sanguíneos, lo que puede producir rupturas capilares y sangrados intensos.
Otro punto clave que menciona Ayurveda es el fuego digestivo (agni). Si el agni está débil, se genera tejido crudo e inmaduro que el cuerpo elimina como un flujo menstrual excesivo. Esto puede verse, por ejemplo, en casos de hipotiroidismo.
Ahora, aquí viene la parte más valiosa: ¿Qué Hacer?
La solución real no está en reprimir el sangrado, sino en restaurar el equilibrio de tu cuerpo.
Lo que buscamos no es solo detener el sangrado, sino devolverle al cuerpo su ritmo natural y a la mujer su energía vital.
Desde Ayurveda, el enfoque incluye:
- Descanso y reducir actividad física intensa: tu cuerpo necesita conservar energía para sanar.
- Suplementación de hierro natural: En India se usa loha bhasma o abhrak bhasma. En Occidente, jugo de remolacha, zanahoria, pasas, uvas negras y preparaciones como kumari asava (vino herbal de aloe vera).
- Equilibrio hormonal con alimentos y hierbas: semillas de sésamo, linaza, hinojo, y plantas como shatavari, lodhra, ashoka y amalaki ayudan a restaurar el ciclo menstrual.
- Fortalecer agni y tratar toxinas (ama): si hay toxinas presentes, se inicia con hierbas ayurvédicas tanto para dipana (estimular el fuego digestivo), como para pachana (digestión de ama), en lugar de usar ghee o tonificantes.
- Fórmulas personalizadas: porque no hay dos mujeres iguales. El tratamiento siempre debe considerar la constitución (prakruti), desequilibrio actual (vikruti), estilo de vida, dieta y emociones.
Ayurveda también enfatiza el diagnóstico diferencial. A veces es necesario realizar pruebas como Papanicolaou, perfil de sangre o incluso biopsias para descartar causas graves como displasia cervical o trastornos sanguíneos.
Por otro lado, los efectos secundarios de los tratamientos convencionales no son menores.
Anticonceptivos hormonales pueden alterar el metabolismo, aumentar el riesgo de trombosis, causar depresión o ganancia de peso.
Los antiinflamatorios pueden irritar el estómago o dañar el hígado. Y las cirugías, aunque necesarias en ciertos casos, no siempre resuelven el origen del desequilibrio.
En resumen, la menorragia no es solo un problema de sangre. Es una señal de que algo está fuera de balance. Escucharla desde una mirada integradora como Ayurveda puede abrir el camino hacia una solución real, sostenible y alineada con tu naturaleza.
Si este tema resonó contigo, comparte este artículo con otras mujeres que estén buscando una solución distinta, una que no tape el síntoma, sino que sane desde la raíz.
Porque cuando sanas desde adentro, todo cambia.
